BECAS COMEDOR PARA EL ISCE EN SANTANDER
Becas comedor en el Colegio Cumbres y el CEI Niño Jesús del Instituto Secular Cruzada Evangélica (ISCE) en Santander
En el Colegio Cumbres y el CEI Niño Jesús en Santander atienden a niños en situaciones difíciles por las circunstancias de su familia, entre ellas: familias desectructuradas, monoparentales, numerosas, inmigrantes, de etnia gitana, con bajos ingresos o con padres desempleados. Gracias a la intervención de la Fundación con las Becas Comedor, se han podido cubrir su necesidades nutricionales a través de una alimentación equilibrada, sana y casera, adaptada a las necesidades de cada niño según su edad, intolerancias, etc. Además, una buena alimentación es esencial para un mejor desarrollo académico.
También se han trabajado los hábitos de higiene y salud relativos a la alimentación, así como la educación y modales en la mesa. El clima de convivencia a sido muy positivo, lo que conlleva un entrenamiento de las habilidades sociales necesarias para la vida, tanto durante el comedor como en el tiempo libre dirigido posterior, aprovechando las pequeñas dificultades y problemas del día a día como oportunidades para el aprendizaje y el crecimiento.
Estos espacios de tiempo libre dan la oportunidad de disfrutar de actividades de ocio saludable, donde se ponen en práctica valores y actitudes educativas. Además, poder participar en el comedor facilita la integración social de estos alumnos con sus demás compañeros. Las becas comedor también permiten prevenir conductas de riesgo que se hubieran derivado de permanecer solos en la calle o en sus domicilios durante los horarios de las comidas, fomentando un mejor desarrollo gracias al ofrecimiento de un espacio de seguridad.
Con el objetivo de conseguir un mejor acompañamiento y seguimiento del proceso de cada alumno, el personal del servicio de comedor se coordina con el personal docente, lo que se refleja en una mejora notable en el ambiente familiar al reducir el estrés al que están sometidos los padres, ya que tienen la tranquilidad de que sus hijos están seguros y bien atendidos cuando no pueden estar con ellos por razones laborales ineludibles.
Así, una acción que a priori puede ser simple como son las becas comedor, muchas veces marca la diferencia, no sólo en el presente de los niños, sino también en su futuro.
