• En el barrio de Matete, los Padres Guanelianos acogen en el centro Foyers Sainte Famille & Mama Africa a niños entre los 6 y los 15 años y les proporcionan un acompañamiento posterior. Se trata de una acogida integral, internado, alimentación, vestido, atención higiénico-sanitaria y psicológica, formación básica y profesional, con el fin último de conseguir su reunificación familiar.

• También cuentan con un centro abierto, «Punto de Agua», al que los chicos pueden acudir a cualquier hora del día o de la noche a descansar y comer. 

• Al mismo tiempo disponen de un Centro de Atención Sanitaria en Matete que atiende a enfermos de tuberculosis, paludismo, sida y traumatismos varios.

• Mediante una Unidad Móvil, que transita desde las 19.00 h. hasta las 10.30 am. por las calles de Kinshasa, prestando asistencia sanitaria de primeros auxilios, escucha, búsqueda de soluciones a los problemas que plantean, envío al Centro Punto de Agua para el descanso nocturno, buscando la reinserción familiar, cuando hay alguna posibilidad.

Hablar de la capital de la República Democrática de El Congo, es hablar de miseria, inseguridad y abandono. Conocida hasta 1966 como Leopoldville, Kinshasa, es la ciudad que, a orillas del río Congo, ofrece a sus habitantes deambular en busca de alimentos,  aseo o simplemente pasear. Con más de 12 millones de habitantes, es una de las ciudades más pobladas del África subsahariana y ocupa el tercer lugar entre los países más pobres del mundo.

Los conflictos armados entre las etnias que habitan el país, hutus y tutsis (entre otras), duran años. La extracción y obtención de recursos naturales (carbón, coltán, piedras preciosas…) por parte de países desarrollados o limítrofes, la inseguridad, la miseria en la que viven, son reflejo de la situación de emergencia humanitaria y sanitaria en la que se encuentra el país. Es la ciudad del mundo donde más casos de ébola suceden.

La vulnerabilidad y desprotección de la infancia en este ambiente es extrema, por eso la labor de los Padres Guanelianos es vital para que estos niños no se encuentren en la calle abandonados a su suerte, sin protección y sin oportunidades. Gracias a OSEPER muchísimos niños consiguen tener una mejor calidad de vida: El total de niños acogidos en el «Punto de Agua» está en torno a 220 y son casi 3.000 los que al año acuden al centro durante el día. Con la unidad móvil atienden a unos 1.200 niños en atención sanitaria y alrededor de 1.700 en resolución de problemas. Y sólo en el centro de formación profesional Limete estudian 117 niños. Tú también puedes ayudarnos a darles a estos niños la oportunidad que necesitan para construir un futuro mejor. ¿Te animas?