Perú, una realidad que no nos deja indiferentes
En Perú viven una situación crítica a la que debemos ponerle freno: la desnutrición infantil es uno de los grandes problemas, seguido del analfabetismo, de niños que no son escolarizado por la necesidad de trabajar. Niños que normalmente no pueden asistir a la escuela porque deben atender a sus hermanos más pequeños mientras las madres trabajan. Es más, los pocos que sí pueden asistir a la escuela, no tienen el rendimiento académico necesario debido a la mala alimentación y a la falta de nutrientes. Unido a ello, tenemos unas aulas abarrotadas debido a la escasez de escuela en la zona, siendo todo un reto para los profesores. Esto hace que los niños no sepan realizar simples operaciones matemáticas ni sepan leer, elementos básicos para la vida y su desarrollo personal y profesional en el futuro.
En este video nos cuentan, en primera persona, los testimonios de los niños del Centro de Apoyo a Niños/as Adolescentes Trabajadores (CANAT), una asociación sin ánimo de lucro impulsada por la Compañía de Jesús que promueve el desarrollo de las capacidades y habilidades de los niños para así facilitar su integración política, económica y social.
La Fundación Sociedad Protectora de los Niños apoya a todos sus proyectos: Manitos Trabajando, Manitos Creciendo, Manitos Jugando y su programa Juvenil. Todo un gran esfuerzo que ayuda a estos niños a ser, como la propia directora de CANAT indica, «ciudadanos plenos».